Una iniciativa de investigación colaborativa liderada por el Centro Tecnológico de Telecomunicaciones de Cataluña (CTTC) y el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras "José Benito Vives de Andréis" (INVEMAR) busca apoyar la acción climática mejorando las mediciones de reservas de carbono en los ecosistemas de manglares del Caribe colombiano. Reconocidos como hábitats críticos de "carbono azul", los manglares desempeñan un papel único en la captura y almacenamiento de CO2; sin embargo, son vulnerables al cambio climático y al impacto humano, lo que amenaza con liberar este carbono almacenado y contribuir a las emisiones de gases de efecto invernadero.

Este proyecto, alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 13 - Acción por el Clima, ODS 14 - Vida Submarina, ODS 15 - Vida de Ecosistemas Terrestres, y que también contribuye a la meta de un Océano Accesible en la Década de la Ciencia Oceánica, tiene como objetivo crear un conjunto de datos completo y abierto que combine datos de campo, tecnología de UAV (vehículos aéreos no tripulados) y teledetección para medir con precisión la Biomasa Aérea (AGB) y el Carbono Aéreo (AGC) en los manglares del Caribe colombiano. Con estimaciones mejoradas de las reservas de carbono, el proyecto podría permitir que científicos y responsables de políticas tomen decisiones informadas para preservar estos ecosistemas vitales y reducir emisiones, apoyando tanto la mitigación del cambio climático, la conservación de la biodiversidad y el desarrollo costero sostenible.

Además de informar la política, este proyecto podría contribuir con métodos para mecanismos financieros como proyectos de carbono azul, pagos por servicios ecosistémicos y marcos como el programa REDD+ de la ONU, que promueven la conservación de manglares mediante incentivos económicos. Al mejorar nuestra comprensión del almacenamiento de carbono en manglares, el CTTC y el INVEMAR están también sentando las bases para soluciones escalables que puedan beneficiar a los ecosistemas de manglares en todo el mundo.

Este trabajo cuenta con el apoyo de Lacuna Fund y la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ).